, al nacer, viene a unirse con la Tierra. No sólo ha de conocer las relaciones y leyes de la naturaleza, sino también ha de conocerse a sí mismo, es decir, debe introducirse paso a paso en su corporalidad y en la gran corporeidad que llamamos humanidad. La muñeca en manos de un/a
puede completar el resto, pues tendrá espacio suficiente para permitir que su muñeca se ría, llore o sonría dependiendo de cómo esté la situación del propio
en todas sus andanzas, por esto, está confeccionada con materiales bien pensados, la lana, el algodón y las fibras naturales pueden estimular los sentidos del